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Un migrante abogado que escalo hasta ser jefe del Tribunal de Ética de la Orden de Abogados de Amazonas en Brasil

En Brasil ejercer el derecho depende de una prueba que muy pocos pasan

*Comenzó vendiendo jugos en un semáforo. En octubre de 2021 recibió la “Carteira de habilitação profissional de la OBA”, documento que le permite el ejercicio pleno de la abogacía en Brasil.

 Por: Lis Carolina Martínez

Manaos -Brasil

Sólo quien sabe lo difícil que es validar un título profesional en Brasil, puede apreciar el logro alcanzado por Eliud Rafael Blanco Hernández, quien no solo consiguió revalidar su título de abogado de la Universidad Bicentenaria de Aragua sino además pasar los rigurosos y difíciles exámenes de la Orden de los Abogados Brasileños, OAB, el equivalente a nuestro Colegio de Abogados.

En Brasil se puede estudiar derecho y egresar de una universidad, pero para ejercer la profesión se requiere pasar dos exámenes de la Orden de Abogados de Brasil, que son complejos y difíciles, muchos abogados nunca logran pasar ni siquiera uno de ellos.

Cuando combinamos para nuestra entrevista me dijo que yo sería la primera en dar a conocer su historia en Venezuela, su patria añorada, aunque ya todos los medios brasileños se han hecho eco de su triunfo, un triunfo que es el primer paso para él, como profesional, y un hecho que demuestra a muchos migrantes venezolanos que triunfar en un país diferente al nuestro   es posible.

El logro de Eliud Rafael es tan grande que, para ponerlo en contexto, tenemos que explicar que la prueba que pasó, es tan difícil que   cada año es reprobada por el 90% de quienes la presentan, la gran mayoría abogados brasileños formados en Brasil.

Justamente en el año 2021, asociaciones de profesores de derecho de todo el país reclamaron que   esta fue la prueba más difícil en la historia de la OBA.

Vista así, esa prueba de la orden de los abogados brasileños es casi una quimera para un migrante venezolano que llegó a estas tierras sin nada sólo aferrado a su fe y vendiendo jugos en un semáforo de Boa Vista.

Fe, visión, trabajo

Salió de Venezuela el 17 de octubre de 2017, agobiado por la crisis económica y moral de nuestro país, convencido de que el título profesional que había alcanzado con el sacrificio de su mamá y el esfuerzo propio no le serviría de nada en un país donde en el sector público sólo se puede surgir a través del amiguismo, o el compadrazgo político. Estaba seguro, y lo está aún, que su sueño de ser un Fiscal del Ministerio Público nunca sería posible sólo con su esfuerzo y su honestidad.

Cuando era solo un niño le prometió a su madre que velaría por su bienestar y cuidaría de ella siempre, y esa promesa se le hacía difícil de cumplir en una Venezuela donde los servicios de salud y el mínimo conford  son cosas de lujo.

Llegó a suelo brasileño con unos termos para vender café en la calle y allí recibió una primera decepción, vender café en este país no es un buen negocio, pues en todas partes lo regalan.   Cuenta que – al día siguiente regaló los termos-para comenzar a vender agua y dindin(helado) en la calle y así comenzó a sustentarse y a mandar dinero para su madre y sus dos hijos que habían quedado en Venezuela.

Después, decidió emprender camino a  Manaus  en busca de nuevas oportunidades, aquí pasó muchas pruebas   intentó trabajar en el Puerto de la ciudad,  pero se agobió de inmediato y pensó a montar un negocio de restauración de zapatos en el centro de la ciudad. Su Papá le había enseñado el oficio de zapatero y usó esos conocimientos para   sobrevivir.

Fue, justamente, en esa banca de restauración de zapatos en el centro de Manaus que conoció al cliente que cambiaría su vida. Recuerda que un día llegó un hombre para restaurar algunos zapatos, y fue ese brasileño quien después de hacer una oración le recomendó ir a la sede de la Orden de los Abogados de Amazonas para buscar información sobre sus posibilidades de ejercer su profesión en Brasil.

Sólo Dios, sólo él

“Tú crees en Dios?”, me pregunta antes de continuar su relato y de inmediato me dice “porque sólo Dios puedo hacer posible lo que yo conseguí. Bueno Dios y el esfuerzo que yo puse ante esa señal divina”, dice.

Al día siguiente de que aquel cliente le recomendó ir hasta la Orden   de Los Abogados, Eliud Rafael, fue a la sede de la organización, allí consiguió hablar con la secretaria del presidente, “ella estaba muy estresada ese día y cuando yo intenté hablar con ella tenía una actitud que no parecía amistosa, sin embargo, yo me atreví y le hablé. Tu no me vas a creer, pero ella, cuando me miró la cara, su expresión cambió y no sólo me atendió, me escuchó y me prometió hablar con el presidente de la OBA para plantear mi caso”.

Al Día siguiente Eliud retornó y consiguió la anhelada entrevista con el presidente de la Orden de Abogados del Estado Amazonas, y ese mismo día consiguió un trabajo como auxiliar de un secretario del tribunal de ética, “yo era algo así como el auxiliar del auxiliar del auxiliar”, cuenta y sonríe.

Al tercer día de trabajo, su jefe faltó, y se vio en la obligación de hacer atendimientos y otros trabajos donde destacó, y a la semana fue promovido como auxiliar administrativo. En ese cargo pasó un año y paralelo a ello hacía la reválida de su título en la Universidad Federal de Amazonas, una Especialización en la escuela Superior de los Abogados Brasileños y además se preparaba para los exámenes de la OBA.

A principios de 2021 llegó la hora, presentó las pruebas y las pasó, para convertirse no sólo   en orgullo de su familia, sino de sus colegas de la OAB Amazonas que publicaron un aviso para felicitarlo y sacaron   a la luz pública aquella historia del venezolano que vendía jugos en un semáforo y hoy es un abogado reconocido en Brasil.

Familia pequeña

Eliud Rafael Blanco viene de una   familia pequeña, perdió a su padre hace muchos años en un accidente de tránsito.

Hoy día vive en Manaus  y  ya consiguió traer a todos los suyos para Brasil. Aquí   trabaja duro y cumple la promesa que le hizo a su mamá cuando era sólo un niño:  la cuida y la protege. También consiguió traer a su única hermana y a sus sobrinos.

Como la mayoría de los venezolanos añora su tierra y sueña con el día en que sea un país libre para retornar y ayudar en su reconstrucción.

Los 3 secretos

Cuando se le pregunta por el secreto de su éxito, lo resume en tres puntos:

1.- Fe que, a su juicio, es un acto compuesto que incluye la intersección de Dios y el esfuerzo propio.

2.-Entrar en la lucha, o lo que es lo mismo decidirse a dar los pasos para lograr los objetivos

3.-Finalmente mucha disciplina para alcanzar las metas

La autora de la nota; Lis Carolina Martínez es Periodista venezolana egresada de la Universidad Católica Andrés Bello. Vive en Brasil como refugiada desde 2018, donde trabaja como profesora de español y con organizaciones sociales que ayudan a migrantes venezolanos en Manaos. Amazonas. 

@lis.c.martinezperez

lisperiodista72@gmail.com